El mercado de valores de Estados Unidos ha tenido una buena racha desde que Donald Trump fuera elegido presidente en noviembre de 2016.

El fin de semana, Trump ?quien se ha jactado reiteradamente de la buena marcha del mercado de valores durante su mandato? dijo en Japón que “el mercado de valores [estadounidense] ha ido tan bien por mí”, según explica Jonathan Karl, de ABC.

Y a pesar del repunte de más del 20% que hemos visto en el S&P 500 (^GSPC) y el aumento del 30% en el Dow Jones (^DJI) que han llevado a los mercados a unos niveles récord, el buen rendimiento del mercado tras las elecciones no es el mejor de entre los presidentes modernos.

Según datos de Goldman Sachs, la fuerte subida de la bolsa tras la elección de Trump es la cuarta mayor desde 1936. Trump sigue a los presidentes George H.W. Bush, John F. Kennedy y Bill Clinton en términos del rendimiento del mercado de valores a partir del mismo día de la elección.

El repunte tras la elección de Clinton en 1996, con un S&P 500 que experimentó un aumento de un 30% en los doce meses posteriores y más de un 50% en los 24 meses tras su victoria, es de lejos el mejor rendimiento del mercado de valores del que ha disfrutado cualquier presidente moderno tras su victoria electoral.

Los rendimientos del mercado de valores después de la elección de Trump han sido buenos, pero no tan buenos como los de George H.W. Bush, John Kennedy y Bill Clinton (Fuente: Goldman Sachs).

Por supuesto, la magnitud del impacto de Trump sobre el mercado de valores está abierta a debate. Algunos inversores han sostenido que el repunte de este año en el mercado de valores se ha debido a la esperanza de que una reforma fiscal reportaría miles de millones de dólares en ganancias netas a las corporaciones estadounidenses.

Aunque tal y como apuntábamos, los datos de Goldman muestran que las acciones que más se beneficiarían de la reforma fiscal en realidad han tenido un rendimiento inferior este año, lo cual significa que los inversores no tienen mucha fe depositada en que se apruebe una ley fiscal. Las amenazas del secretario del tesoro Steven Mnuchin de que el mercado de valores se derrumbaría en caso de no aprobarse la reforma fiscal, por tanto, parecen sonar bastante vacuas.

Sin embargo, Goldman señala que un sector en el que es claro que la elección de Trump ha mejorado la suerte del mercado de valores es en el de las empresas expuestas a pequeñas y medianas empresas. Este conjunto de acciones obtiene el 71% de sus ingresos de clientes que son pequeñas o medianas empresas, es decir, empresas con 500 empleados o menos.

“Los propietarios de pequeñas empresas se han entusiasmado con la perspectiva de la posible desregulación bajo la administración Trump”, señala Goldman.

“Después de las elecciones, el índice NFIB de optimismo de las pequeñas empresas dio un salto al nivel más alto en más de 12 años. Los precios de las acciones de firmas que obtienen sus ingresos de pequeñas empresas han repuntado un 38% desde las elecciones, mientras que el índice de empresa de capitalizaciones bajas Russell 2000 ha igualado el rendimiento de las de capitalizaciones altas”.

Fuente: YahooFinanzas.com


Source: Economia