El gobierno de Venezuela espera abrir en un plazo máximo de mes y medio el acceso al “petro”, criptomoneda lanzada por el presidente Nicolás Maduro y respaldada por las reservas petroleras del país, anunciaron autoridades.

La población “va a poder comprar sus petros en un plazo no mayor a mes y medio”, dijo el jefe de la superintendencia creada para regir el Petro, Carlos Vargas, en entrevista con la televisora estatal VTV.

Maduro, quien asegura que la iniciativa traerá “nuevas formas de financiamiento” ante las sanciones de Estados Unidos que prohíben a sus ciudadanos y empresas negociar deuda del gobierno venezolano y su petrolera PDVSA, adelantó que la “primera emisión” será de 100 millones de petros.

El valor del petro, según el mandatario, equivaldrá al de un barril de crudo.

La cotización de la canasta petrolera venezolana cerró esta semana en 59,06 dólares por barril, tras una media de 46,66 dólares en 2017.

Analistas consideran que las distorsiones económicas de Venezuela, con declaratorias de default por pagos atrasados de deuda, alto gasto público e hiperinflación, erosionan las posibilidades de éxito del petro.

“Sería la primera moneda virtual emitida por un Banco Central y no cualquier Banco Central, sino uno que ha generado hiperinflación”, declaró a la AFP Jean Paul Leidenz, experto en criptomonedas.

“No es una criptomoneda, es un simple título de deuda, con un ‘activo subyacente’: petróleo”, apuntó por su parte el economista Luis Oliveros.

El funcionario dijo que estiman que la minería actualmente genera entre $80 y $100 millones mensuales. Y que con su estimulación por parte del gobierno podría generaría en 24 meses entre $20 millones y $200 millones.

Vargas destacó la ventajas para producir un bitcoin que estima tiene un costo de entre de $100 a $150 por cada unidad, mientras que en el exterior oscila entre $1.500 y $2.000.